miércoles, abril 23, 2008

Txikiman y la crisis

¡Hola!, ¡soy el gran Txikiman!, ¿me echabais de menos?, ¿como?, ¿que no me conocéis? ...

Pasamos por una crisis, una crisis como nunca se había visto antes, crisis de crisis, crisis en tierras en crisis, crisis infinitamente en crisis, o vamos ... como quieras llamarla esta vez ... algo que nunca había conocido como tal: crisis de villanos. Y es que cada vez hay menos y de peor calidad, salen de debajo de las piedras como churros, con sus trajes de mallas horteras que parecen comprados el día antes de carnaval en un 150 cualquiera, y sinceramente si tu fueras un villano de los de antes, rodeado de esta fauna, ¿no te daría vegüenza que te relacionaran con estos desechos de la sociedad?, ¿te gastarías tus recursos en confeccionarte una armadura molona o un cuartel general?, ¿merecería la pena malgastar tu supermente maléfica criminal en ideas que te pueda chafar un tío con una bolsa en la cabeza? ... la respuesta es obvia, y de todo esto obtenemos una consecuencia y la razón final de la mencionada crisis. ¿De qué vive un superhéroe sin supervillanos?.
La cosa está mal y parece que irá a peor, de momento me han suprimido el poder de volar, hay que ahorrar para hacer mas llevadera la crisis, así que cumplo con mi trabajo desde el suelo, es algo dificil adaptarse a algo que era para mi como el andar para otros, es como si de repente tuviera que moverme gateando, pero gracias a mi superfuerza puedo cargar con la pesada escalera que me han dado para desempeñar mis tareas en la tienda en la que trabajo, mi tapadera cuando solo soy un humano cualquiera, moliente y corriente llamado Txiki, una labor que ahora, con la escasez, ocupa casi todo mi tiempo, debido a la casi nula necesidad de ponerme las mallas.

Como un Kaine barato se pensará que es mi clon o algo, a ver si se degenera mientras espera o algo ...

Mientras oigo a mi jefe divagar sobre las tareas que nos esperan este año, escucho a mi compañera quejarse sobre sus problemas económicos y después, mientra coloco etiquetas subiendo precios por tercera vez este mes, recuerdo tiempos mejores, una época en la que todos los días un nuevo supervillano ocupaba mis tediosas mañanas de curro ... me dejo sumerger en el flashback ... niuniuniuniuuuu (tipica musiquilla antes de un flashback) ... mientras hablo por telefono veo por el rabillo del ojo como se me acerca un cochino, es temprano pero ya hay gente en la tienda con ganas de comprar con lo que amueblar su batcueva o buscando el tornillo que se le cayó a su pistola de hielo; se acerca, se acerca, se acerca, hasta tal punto que siento su aliento en el cogote, - disculpe le puedo ayudar - si, por favor - me sorprende verlo tan erguido, con el ceño fruncido y cara exigente tras su ridicula perilla, sin embargo, que coño, estoy hablando por telefono, - un momento por favor y enseguida le atiendo -. Parece que mi conversación le interesa porque por mas que me muevo no se separa de mi, así que aprovecho mi conocimiento del terreno para esconderme tras un rack y darle esquinazo, en dos minutos acabo con el telefono y voy en su busca pero ha desaparecido, mmm sospechoso, bueno, seguro que está atormentado a mi compañera, bueno mejor, yo sigo con lo mío.
Mmmm, bueno dos etiquetas mas en el pasillo de la tornillería y acabé, voy para allá, vaya sigue por aqui ese tipo, oh oh, se acerca con una mirada de odio en sus ojos, no puedo evitar ponerme en guardia. - ¡Racista!, me grita delante de todos, - ¿cooomo? - pregunto, sin saber a que se refiere, sin embargo él sigue gritando - ¡Racista!, sabes como me llamo, y no me quieres atender por mi nombre, ¡Xenófobo! - ¿Y su nombre es? - Como si no lo supieras, ¡soy Tom El Negro por supuesto!.

Un cliente como los de antes ... ais, como los echo de menos ...

Enseguida lo reconozco, es el tio ese que iba de perrillo faldero con Juggernaut aunque he oído que hacía lo que quería con el bueno de Juggy, quizá tenga poderes mentales, no sé, tengo que evitar que los use aquí, sean los que sean, pero no puedo desenmascararme ante tanta gente daría al traste con mi identidad secreta y luego seguramente Quesada me haría olvidar toda mi vida despues de que mi mujer hiciera un pacto con Mephisto, nooooo, tengo que solucionarlo de alguna manera, piensa, piensa, piensa ... Tom mira a su alrededor y solo se me ocurre decir: - aquí el único que se automargina eres tu, te estas haciendo una buena película a base de usar tu imaginación - ..., me mira con frustración y se va ante las miradas espectantes del resto de cochinos.
Tras lo que ha parecido una escena de Scrubs, disimuladamente, me dirijo hacia un lugar seguro y despejado, la reserva de la tienda, allí me cambio de traje y vuelvo a la escena de los hechos, en principio no veo nada fuera de lo normal, ni explosiones, ni gente poseída, ni siquiera un paquete de pilas vacío ... sin embargo al final del pasillo viene una compañera gritando: - es Tom el Negrooo, viene a por mi Txiki, lo va a mataaar ...

¿Donde está?, que le voy a pegar dos hostiassss ...

Efectivamente viene por el pasillo, ha recuperado su bastón de la taquilla en seguridad y me viene buscando por cada pasillo por el que pasa, el fuego inunda su arma como dispuesta a ser disparada, entonces de una carrera elegante y ágil me cruzo en su camino, no esperaba encontrarse con uno de los héroes mas aclamados de la isla y duda durante un momento, momento que aprovecho para ... despertarme de mi ensueño ...
... ¿tienes algo parecido? - Que noooooooooooooooo. Pesado el cochino. Con lo feliz que estaba yo recordando los buenos tiempos y viene el tipo a molestarme, fué una batalla gloriosa, sin lugar a dudas, digna de recordar, que finalizó con Tom el Negro en Tenerife II y la gente aclamándome ... aún de vez en cuando se habla de aquello, sigh, maldita crisis ...

Nooooooo no lo tengooooo, ni nada parecido, ni similar, ni homonimo, ni igual, ni nada, ¡coooooño!

to be continued ...

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