martes, febrero 28, 2006

Los comics para roleros son realmente divertidos


Si me preguntas cual es mi sección favorita de la revista Dólmen sin dudarlo contestaría que el But I digress ... de Peter David (a partir de ahora P.D.), no sé si es bueno o malo para los que escriben en dicha revista ;), si es malo lo siento. Y es que tengo que confesar que muchas veces he pensado en no comprar la revista en favor de algún otro cómic pero recordando lo enganchante de esta columna lo he hecho sin dudarlo, sólo por un par de páginas al final de la revista (sin desmerecer el resto que he disfrutado igualmente).
El objeto de este blog es la columna de P.D. aparecida en la Dólmen de Febrero, en resumen (leedla por favor): recomienda un comic, sin ningún interés mas que el que le suscita este a él mismo, muy al estilo P.D.: Los Caballeros de la Mesa del Comedor,
que trata de un grupo de rol jugando alrededor de una mesa simple y llanamente (dibujos estáticos y sosos guión desternillante).
Vamos que trata sobre anécdotas y situaciones que todo rolero hemos vivido con un humor muy muy apropiado y que, aunque pueda parecer dirigido a un público selecto (el rolero) entretiene, como muy bien apunta el bonachón de David, a cualquier amigo de vecino.
Y ahora el objetivo de mi blog que no es otro que, tras leer la mala experiencia que cuenta P.D. de su primera y única partida de rol, recordar mi "primera vez" (como rolero, mente limpia). David comenta que se hizó un personaje durante media hora, le gustó, le puso habilidades, le dió personalidad y al rato el "Amo del calabozo" le transformó en un cardo (si sí como lo oyes) y estuvo el resto de la tarde esperando a que pasará algo sin tan siquiera poder hablar o participar en algo, desde entonces odia el rol ... la verdad, no le culpo.
Mi primera experiencia fué similar aunque no parecida, yo padecí el mal del "Jugador que sabe enseñando a los que no saben". Era un verano tras el colegio, sexto o séptimo, y un colega se hizo con una copia del reglamento básico de Dungeons & Dragons (niveles 1-3, triste pero por algún lado hay que empezar), yo ya había devorado algún libro juego y estaba emocionado y muy interesando por jugar pero sólo eramos tres, sería interesante al menos encontrar otro jugador, pues bien el colega, que impuso la regla de que solo el podía dirigir el juego y al que llamaremos el Tirano a partir de ahora, se trajo a uno que llevaba jugando, que sabía y que era un gran jugador. ¡Que suerte la nuestra!, bueno, vamos a hacer los personajes, el sistema era muy sencillo y enseguida teníamos nuestros personajes ... mmm ni recuerdo que llevaba, me suena que un elfo mago, si si era un elfo mago. "El gran jugador" quería un halfling pero quería que fuera un hobbit ya que había leído un libro que le gustó, un tal El señor de los anillos, y allí se llamaba así esta raza según él, el que dirigía (el Tirano) admirado no discutió mucho y accedió, su nombre era Frodo ... original. La partida empezó con la participación de los tres jugadores pero en pocos minutos fué derivando a un monólogo acompañado por los asentimientos del Tirano que lo miraba cada vez mas admirado por lo que mi emoción pasó primero a aburrimiento y después a sueño.
Toda estas serie de escenas increibles me recordaban a una película de piratas o ladrones antiguas donde se sucedían cosas irreales e imposibles, hasta que llegó el momento culminante de la sesión: había un riachuelo que nos daba muy mala espina, y al fondo se divisaba lo que parecía un cofre, ¿que habría dentro de él para estar en un lugar como ese? pero ¿sería precavido internarse en las aguas de ese lugar?. ¡Un momento! - gritó el Gran Jugador - ¡Tengo la solución!, saco mi arco y una flecha a la que le ato mi cuerda (de cáñamo) de 15 metros y disparo al cofre ... mmm ... vale ... ¿y ahora? ... ¡pues tiro de la cuerda y saco el cofre del agua! ...................

En fin a partir de ahí hubo una discusión, (aunque continuaba el monólogo, el otro colega y yo estabamos demasiado perplejos) por fin se dejó aparte la admiración al menos, que acabó haciendo que la partida acabara antes de lo previsto seguramente con excusas de unos y otros: mi madre me mata si llego tarde, mañana seguimos, que tarde es ¿no?, dejé a mi gato en la lavadora voy a ver si está limpio ...
Vamos que mi primera experiencia en el mundo del rol fué tan frustrante e inutil (ademas de una gran perdida de tiempo) como la de P.D., sin embargo no cejé en mi empeño y tuve que imponer mi personalidad, a lo largo de mi carrera rolera tuve que renegar de muchos directores de juego mediocres e imponer muchas de mis ideas, eso si siempre contando con mis colegas, que antes que jugadores eran amigos, y sobre todo tuve que derrocar al Tirano (risas). Y si, le cogí gusto al rol y disfruté con él durante mucho tiempo, me convertí el B.A. de mi grupo y quedabamos fin de semana si y siguiente también, era una excusa mas para una reunión de colegas. Stop, que como me siga me voy a poner pasteloso.
Hoy día el rol es un lío, demasiados Manuales, módulos, suplementos ... antes era toda una novedad que saliera un juego nuevo y todo un acontecimiento, sin embargo si os llama la atención el rol, elegid vuestra temática y adelante, intentadlo, no os arrepentireis.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Enjoyed a lot! » » »